La Agencia de Servicios Financieros de Japón (FSA) se dispone a implementar una importante reforma de su normativa sobre criptomonedas, con el objetivo de clasificar los activos digitales como «productos financieros» en virtud de la Ley de Instrumentos Financieros y Mercado de Valores. Se espera que esta medida equipare los activos digitales con los valores tradicionales, lo que podría reducir la carga fiscal y frenar las actividades ilícitas.

