Tras semanas de intensas negociaciones y un cierre gubernamental sin precedentes, el Senado estadounidense ha alcanzado un acuerdo bipartidista para poner fin a la paralización del gobierno. El pacto, negociado entre los demócratas moderados, la dirección del Senado y la Casa Blanca, tiene como objetivo reabrir las agencias federales y garantizar la financiación hasta el 30 de enero, con algunos departamentos recibiendo presupuestos para todo el año.

