Pruebas recientes a gran escala, incluyendo un mercado simulado por Microsoft y una competición de equipos rojos, han revelado importantes vulnerabilidades de seguridad y limitaciones funcionales en los principales agentes de IA. A pesar de los avances, los agentes de IA actuales tienen dificultades con la toma de decisiones complejas, la colaboración y son susceptibles a la manipulación, lo que indica que aún no están listos para su implementación generalizada en el mundo real.

