El precio de Solana ha caído recientemente por debajo de la importante marca de los 180 dólares, a pesar de las sustanciales entradas de capital en los nuevos fondos cotizados (ETF) vinculados a Solana. Esta divergencia pone de manifiesto una creciente brecha entre el interés de los inversores institucionales y el rendimiento inmediato del token en el mercado, lo que plantea interrogantes sobre los factores que influyen en su valoración actual.

